SANTIAGO DE COMPOSTELA (I)

En esta verde tierra, cuenta la tradición que estuvo el Apóstol Santiago, con intenciones evangelizadoras pero al fracasar decidió volver a Jerusalén donde sería decapitado, prohibiéndose su enterramiento. Así pues, sus discípulos en secreto trasladaron su cuerpo, que llegaría tras la travesía marítima remontando el río Ulla, al puerto romano. Allí, en un cementerio en el bosque de Liberum Donum, enterraron el cuerpo del Apostol y levantaron un altar sobre el arca de mármol.

Tras las prohibiciones de visitarlo se olvidó su sepultura hasta que en el año 813 un eremita llamado Pelayo observó resplandores en el lugar, lo que desencadenó que a este lugar se le llamara Campus Stellae (Campo de la Estrella), lo que desembocaría en el nombre de Compostela que tiene actualmente.

Descubierta finalmente su tumba e informado el Rey Alfonso II del descubrimiento, se le proclamó patrono del reino, edificándose en ese mismo lugar un santuario que constituiría el origen de la actual Catedral.

A partir de entonces, se empezarían a producir milagros que influirían en el momento histórico de la Reconquista, llenando de valor a los guerreros y a los peregrinos que trazaron poco a poco el Camino de Santiago, tan famoso en la actualidad.

De esta manera, a partir del siglo XI, Santiago se convierte en centro del cristianismo europeo atrayendo a una gran multitud de peregrinos entre los que se encontraron reyes, príncipes y santos.

El momento de máximo esplendor de la ciudad llegó durante los siglos XII y XIII, declarando a Santiago de Compostela Ciudad Santa, lo que supuso el desarrollo pleno de la ciudad que se consumó definitivamente gracias a las óptimas comunicaciones existentes en Compostela que articulaban toda Galicia. Con esto, se convirtió en el lugar más apropiado para la construcción del Templo y en la sede de la capital de Galicia.

En esta época esta ciudad fue escogida como residencia de órdenes religiosas y nobles, además se convirtió en el centro de peregrinación más importante de Occidente, asentando así su poderío como ciudad.

A principios del siglo XVI, además, se creó la famosa Universidad de Santiago, pero este auge se verá mermado por la reforma protestante y la epidemia de peste que asola toda Europa en este período, debilitando las peregrinaciones.

Esta situación cambiará en el siglo XVIII, debido a que la actividad económica se trasladará gradualmente hacia la costa atlántica, por lo que las tierras del litoral asumirán entonces el mando del comercio. De esta manera, desde esta época hasta el siglo XX, las actividades económicas predominantes de la ciudad-santuario serán la universitaria, la religiosa y la sanitaria.

Durante el siglo XX, en la década de los sesenta, la ciudad recupera toda la prosperidad anterior, gracias a la impresionante subida de estudiantes y a la construcción del Hospital General de Galicia. Más tarde, se convertirá en la actual capital de Galicia. . Una vez iniciado este resurgir y hasta nuestros días, en los albores del siglo XXI, Compostela emerge como centro cultural de Galicia y símbolo de la unidad para todos sus habitantes. A esto se suma el desarrollo urbanístico, es decir, además de conservar perfectamente el caso antiguo, en Santiago las infraestructuras y la arquitectura constituyen la base de una verdadera capital europea, ya que las nuevas construcciones son perfectas representaciones de la cultura de este nuevo milenio, por ejemplo, el Auditorio, el Centro Gallego de Arte Contemporáneo, el Palacio de Congresos…


Para terminar con la historia de esta maravillosa ciudad, podemos decir que desde 1993 hasta nuestros días, el número de visitantes atraídos por la riqueza cultural de Santiago ha superado todas las expectativas, y actos tan importantes como el Xacobeo ha llegado a tener más de 400 millones de seguidores.

Con esta historia, podemos afirmar que Santiago de Compostela es una de las ciudades más importantes de nuestro país que se sigue expandiendo cada vez más. Su historia es una síntesis entre la antigüedad y la modernidad, ha ido evolucionando desde la época romana hasta nuestros días, conservando todos sus restos antiguos, pero a la vez, modernizándose y adaptándose a los nuevos tiempos.

MONUMENTOS Y SITIOS PARA VISITAR

El Camino de Santiago

Desde el siglo IX, desde que fue descubierta la tumba del Apóstol Santiago, hasta la actualidad, la peregrinación a Compostela se ha consolidado como una de las rutas más importantes del cristianismo, fijándose el camino principal hasta Santiago en este siglo, ya que antes existían diversas rutas nada seguras, de esta manera, en los siglos posteriores, la ruta oficial fue mejorada con puentes, calzadas, hospitales y hospedajes que duran hasta nuestros días. Como consecuencia, miles de peregrinos vinieron de todas partes de Europa, lo que originó nuevos núcleos de población, que trajeron una gran renovación económica y cultural. En definitiva, el Camino fue y es una de las rutas de peregrinación religiosas más famosas, pero además, este camino supuso para occidente la influencia directa con la cultura europea, constituyendo una fuente de comunicación e intercambio espléndida.
Finalmente, el camino fue proclamado Primer Itinerario Cultural Europeo y en 1993, esta ruta de peregrinación fue nombrada Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Son numerosas las rutas de peregrinación jacobea que a lo largo de los siglos han ido creándose en España, pero una llegará a convertirse en el Camino por antonomasia, el camino francés, aunque los que más nos interesan son los de nuestro país, los Caminos de Santiago en Galicia, éstos son: Camino de Santiago Portugués del Interior, Camino de Santiago Portugués de la Costa, Camino de Santiago de la Ría de Arosa, Camino de Santiago de los Ingleses, Camino de Santiago a Finisterre.
LA CATEDRAL DE SANTIAGO

La Catedral de Santiago es uno de los monumentos más importantes de nuestro país y podríamos decir que es un referente religioso para todos los cristianos. Debido a su importancia, vamos a explicar detalladamente cómo es, su estilo, y sus diferentes partes.

-La Catedral está compuesta de granito con cubiertas de lajas en este mismo material. A estas cubiertas se podía acceder por medio de las torres de la fachada medieval del Maestro Mateo. Forma parte del bello y ejemplar templo románico, al que los siglos han ido revistiendo de un excepcional ropaje gótico, renacentista y, de modo especial, barroco.Subir a las cubiertas del Santuario Jacobeo es acceder a un lugar privilegiado, con unas vista estupendas, apreciando toda la ciudad, así como el amplio panorama de la comarca que la rodea, del que forman parte las históricas montañas, llenas de tradiciones jacobeas y de la peregrinación.

Esta catedral tan importante es una construcción románica de planta de cruz latina, brazo longitudinal y está formada por tres naves, un deambulatorio en la cabecera y una tribuna que recorre todo el recinto.

Esta catedral es inmensamente grande y tiene muchas capillas laterales ordenadas a lo largo del templo y con un espacio propio.

Las naves laterales están cubiertas con bóveda de arista y la nave central con una bóveda de cañón peraltada y sujeta por arcos fajones y con una galería con cuarto de cañón.

En cuanto a las fachadas, se destaca la del Obradorio que ahondaremos un poco más en ella más adelante. A parte de esta, se encuentre la fachada de Acibechería que corresponde al neoclasicismo; la fachada das Praterías que es románica y además guarda muchos iconos medievales; y la Puerta Santa, de estilo barroco que tan sólo se abre los años santos.
La fachada del Obradorio de la Catedral gobierna la plaza a la que da su mismo nombre. Esta famosa fachada fue realizada en el siglo XVIII, entre 1738 y 1750 por Fernando de Casa y Novóa, y constituye la mejor representación del estilo barroco en nuestro país. Esta obra de arte fue construida con la finalidad de preservar la antigua portada medieval de la crudeza atmosférica. Es una combinación de piedra y vidrio, entre los que destaca el gran ventanal del cuerpo central, además, hay dos torres románicas que reafirman su condición de enorme retablo y de verticalidad, a la derecha está la torre de las Campanas, y a la izquierda está la de la Carraca.
Como podemos apreciar en la fotografía, en la fachada, arriba en el centro, está Santiago, un nivel más abajo, sus dos discípulos, Atanasio y Teodoro, todos vestidos de peregrinos; en medio puede verse la urna y la estrella entre ángeles y nubes; en la torre de la derecha está la estatua de María Salomé, y en la de la izquierda, su esposo y padre de Santiago Zebedeo; sobre la balaustrada, hay muchos santos tanto a la izquierda como a la derecha.
En definitiva, esta fachada tiene una importancia artística, histórica y religiosa inigualable, lo que explica que sea la entrada más característica de la Catedral, a la que se accede por medio de una escalinata, y que haya sido declarada Monumento Histórico-Artístico.

El Pórtico de la Gloria, de estilo románico, fue realizado por el Maestro Mateo a finales del siglo XII. Tiene una estructura arquitectónica que consiste en tres plantas superpuestas: la cripta, representación del mundo terrenal; el pórtico propiamente dicho, anteriormente era la entrada occidental a la catedral y durante la época medieval permaneció abierta, además, representa la Jerusalén celeste; y la tribuna, una planta muy iluminada gracias un rosetóns.
Este pórtico está constituido por arcos de medio punto, correspondidos con cada una de las tres naves de la Catedral, sujetos por gruesos pilares con columnas. El más importante y el más famoso es el arco central, ya que posee tímpano y está dividido por una columna central, el parteluz, con Santiago en el centro. Cualquier peregrino tiene que posar la mano en este parteluz sobre las millones de huellas de todos los que han tocado esa columna y hay que darle tres golpes en la frente a la figura del Apóstol Santiago.

Si nos referimos concretamente al interior de la Catedral, no ha sufrido grandes cambios, lo que destaca es que es una auténtica exposición de la sabiduría de los artistas medievales, como se refleja en su distribución románica de planta de cruz latina con tres naves y el rosario de capillas que recorre toda la Iglesia, que ya hemos mencionado antes.
Lo más significativo de la Catedral es el Sepulcro del Apóstol Santiago, es el corazón de este gran referente cristiano, ya que conserva los restos de Santiago en la cripta que está bajo el Altar Mayor. Además en la parte superior, hay un pasillo que atraviesa la girola a través del cual se puede abrazar al santo.
Al pié de la escalinata del Obradoiro, el Museo permite visitar la conocida como Catedral Vieja, el Tesoro y las Reliquias, el Claustro, las salas de Arqueología, ricas colecciones de tapices, la sala Capitular, la Biblioteca y el Archivo.
En la Biblioteca se guarda cuando no es utilizado el célebre Botafumeiro, el mayor incensario del mundo. En las grandes solemnidades litúrgicas ahuma el recinto catedralicio en un increíble vuelo dirigido por los expertos tiraboleiros.
- La plaza del Obradoiro es importantísima, no solo porque sea el lugar donde se ubica esta catedral sino porque también conserva construcciones que son verdaderas joyas culturales:
• La más moderna es el Pazo de Raxoi, edificio neoclásico edificado por el mandato del arzobispo Bartolomé de Raxoi y Losada y lo más notable es que en su frontón central hay una minuciosa descripción de la batalla de Clavijo y sobre ésta hay una escultura de gran belleza del Apóstol.

• En el lateral norte de esta famosa plaza se encuentra el Hostal de los Reyes Católicos, en el siglo XVI fue creado como un hospital real y una hospedería de peregrinos por los mismos reyes. Aunque hoy en día sea un hotel lujoso, contiene una decoración plateresca exquisita en su portada y los cuatro patios interiores son dignos de ver.


• El Obradoiro tiene unos edificios muy grandes entre los que destaca el Colegio de San Jerónimo por la humildad de su porte y su encanto especial, además este colegio acoge el Rectorado de la Universidad, y la portada, es una pieza bellísima del románico tardío, procedente de un viejo hospital.
• Para terminar con el Obradoiro, hay que citar al Palacio de Guelmírez (Pazo de Xelmírez). Es considerado la obra más importante del románico civil en España, tanto por la sobriedad de sus exteriores como por, aunque es menos famoso, su interior compuesto de ricas piezas románicas, como bóvedas del refectorio, decoradas con escenas de un festín medieval.
• También podemos considerar que la Iglesia de San Fructuoso está en la plaza, ya que se puede apreciar perfectamente desde la terraza exterior del Hostal. Es un templo de estilo barroco que data del siglo XVIII, en cuya cornisa destacan cuatro esculturas que representan la Prudencia, la Justicia, la Fortaleza y la Templanza. También se contempla desde esta misma terraza la típica Rúa das Hortas, una calle preciosa que cualquier turista o peregrino debe cruzarla.

- Como sitio curioso también recomendamos visitar el Colegio de la Fonseca, junto a la plaza del mismo nombre. Este colegio recoge la Biblioteca de la Universidad y lo más importante es su claustro y su portada renacentista. Fue sede del Seminario de Estudios Gallegos y del primer Parlamento democrático de la autonomía gallega.

- Por fin llegamos a la importante Plaza de las Platerías, a la cual se accede por la puerta sur de la Catedral que tiene este mismo nombre, la única puerta románica que se conserva:
• Hoy en día en esta plaza se encuentran muchísimas joyerías, que son como las tiendas típicas que animan esta plaza, y además en su centro se encuentra la importante fuente de estilizada línea conocida como la Fuente de los Caballos.

• Frente a esta fuente se construyó la Casa de Cabildo, un enorme caserío de estilo barroco con tan solo tres metro de fondo. Fue construido con una intención meramente escenográfica, sellar uno de los lados de la importante plaza.
- La extraordinaria Torre del Reloj mide más de setenta metros y está mirando hacia la Plaza de las Platerías y la de Quintana. Su base es gótica, la cual fue hecha por el artista Domingo de Andrade, que realizó en pleno barroco su obra más importante tallando las paredes de esta torre. Ésta aguarda en lo alto la campana de Berenguela y la linterna que guiaba a los peregrinos, la cual es encendida en los Años Jubilares y en ocasiones importantes.
- Otra plaza que rodea la maravillosa Catedral es la Plaza de Quintana, considerada para algunos como la más impactante por su desnudez pétrea. También destaca por su espectáculo de luces y sombras tanto de día como de noche. Se divide en dos planos, la Quintana de Mortos es la parte de abajo, y la Quintana de Vivos es la de arriba.
• En ella se sitúa el Pórtico Real, el lugar por donde salen las procesiones, y la Puerta Santa, la cual solo está abierta los Años Jubilares.
• En el frente sur de la plaza se encuentra la Casa de los Canónigos, también hecha por Domingo de Andrade aunque fue rematada por Casa y Novoa en el siglo XVIII. Destaca por sus monumentales chimeneas y además en sus soportales hay numerosas cafeterías.

• En el otro lado de la plaza también destaca otro caserío que llama la atención por su exuberante decoración vegetal, la Casa de la Parra.
• El muro del benedictino Monasterio de San Paio de Antealtares, desconcertante por su desmesura genial e inquietante, cierra la Plaza de Quintana por el este. Este muro es una pared enorme a la que se asoma nada más y nada menos que 48 ventanas enrejadas, es la admiración de arquitectos de las diferentes épocas. A los pies del monasterio, hay un inacabable asiento de piedras que siempre está lleno, es el sitio preferido para descansar.
• Si seguimos el contorno de la Catedral, nos seguimos encontrando construcciones de una gran riqueza artística. La fachada de la Inmaculada o Azabachería está en la calle del mismo nombre, el nombre del célebre gremio de los joyeros que trabajaban y trabajan aun en este fósil. Esta fachada destaca por su estilo barroca y neoclásico a la vez.
• Pero si comparamos esta fachada como la del Monasterio de San Martiño Pinario, resulta un poco pobre, ya que ésta refleja el poder que alcanzó la orden benedictina llegando a competir con la Catedral y con la propia Inquisición. Este poderío se refleja en su fachada oeste, en sus gárgolas de fantasía y en los claustros interiores. La Iglesia tiene unas dimensiones muy grandes y posee ricos retablos. A esta fachada se puede llegar por medio de calles muy recónditas admirando unas sorprendentes escaleras que se retuercen sobre sí mismas.

OPINIÓN PERSONAL
En este trabajo, hemos intentado informar de la mejor forma posible sobre una de las ciudades más importantes de España. Hemos hecho una selección de los monumentos más relevantes para poder reflejar la riqueza cultural e histórica de esta ciudad. En nuestra opinión, Santiago de Compostela es una ciudad que merece la pena conocer, ya que tiene una infinidad de cosas por ver. Nosotras, que hemos ido a visitar esta ciudad, nos pareció de una riqueza impresionante. Lo que más nos llamó la atención no fue solo su gran catedral conocida en todo el mundo, sino todo el conjunto de la ciudad, todo la ciudad en sí es una fuente de arte, lo que se puede reflejar perfectamente con tan solo un paseo por la ciudad, por esto, recomendamos que si tenéis la opción vayáis a ver esta impresionante ciudad, que no solo tiene unos grandes monumentos, sino también un ambiente que merece la pena disfrutar, con miles de estudiantes que dan vida a la ciudad. También destaca su gastronomía y sus fiestas, pero esto lo trataremos en el siguiente trabajo, ya que esta ciudad tiene mucho por contar. En definitiva, esta ciudad no es tan solo un centro de arte, sino también religioso, histórico, de ocio, es un ejemplo de poderío que vale la pena visitar.

TRABAJO REALIZADO POR CRISTINA MONEDERO Y SARA LÓPEZ